Entrevista a Manuel Segade, director del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía

En mayo de 2017 publicábamos en este mismo medio una entrevista con Manuel Segade, elegido entonces comisario del Pabellón de España en la Bienal de Venecia con Jordi Colomer. Ya era director del CA2M en Móstoles. Hoy, más de seis años después, vuelvo a entrevistarle como director del Museo Reina Sofía. Es el segundo director del Museo insignia del arte español contemporáneo elegido por un concurso y con un jurado profesional. Realmente podríamos utilizar la misma presentación que entonces: “le gusta trabajar en equipo, cercano a los artistas, teórico a pie de tierra… Representa una nueva generación de directores de museos, que buscan una institucionalidad baja…”. Pero los años no pasan gratis; seis años después, con más experiencia y más tablas y, aunque siga manteniendo un perfil próximo con artistas y en general con todos (sigue contestando ahora los WhatsApp, igual que antes los mails), se pone a los mandos de un museo centrífugo, complicado, centro de discusiones, bulos e intrigas; un museo demediado después de una dirección excluyente de 15 años, un museo antipático para el público, ajeno para gran parte del mundo artístico español. Un museo que necesita algo más que un lavado de cara, y que encara con dos años de programación ya cerrada por el equipo anterior. De la periferia al centro, el viaje de Manuel Segade no es un viaje en el espacio, sino en el tiempo. 

Rosa Olivares: Vamos a empezar por el final, cuándo salgas de aquí, ¿cómo quieres que te recuerden? Vamos a pensar en diez años, para que no sean solo cinco…

Manuel Segade: Sí, espero que no sean solo cinco, la verdad, ya te lo digo desde ahora. Porque todo lo que veo que hay que hacer, que es mucho a medio y largo plazo, y es un trabajo enorme… Francamente me gustaría que se entendiese que no habrá sido un periodo de transición sino un periodo de consolidación. Pero en muchos sentidos, porque creo que hay cosas que han pasado aquí en los últimos años que han sido muy importantes y muy positivas, sobre todo en lo que se refiere a la visión internacional del museo, al alcance que ha tenido; gran parte de las polémicas que hemos vivido desde el pasado diciembre en prensa tienen que ver con que, efectivamente, se ha convertido en un bastión cultural que es importante para la escena española e internacional.…