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Social works. Performing art, supporting publics

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Andrea Fraser

Alguna vez he intentado imaginar cómo hubiera sido mi experiencia si en 2003 hubiese visitado el pabellón español de la Bienal de Venecia. Seguro que no tan clara e intensa como la primera vez que escuché hablar de esa intervención. La puerta tapiada, el rótulo tapado y las indicaciones para dirigirse a la puerta trasera con la documentación acreditativa de nacionalidad española se imaginan en mis no-recuerdos. En algunas ocasiones la experiencia directa genera mucho ruido y confusión, que su narración posterior pule hasta crear un mensaje definido y evocador. Así es como la dimensión performativa de ciertas obras artísticas pasa a la Historia. Y esto es lo que ocurre con las prácticas identificadas por Shanon Jackson como social works, aquello que tiene lugar cuando la interacción entre dinámicas teatrales y artísticas genera formas de compromiso político y social.

Social Works. Performing Art, Supporting Publics plantea un amplio campo de investigación dentro del ámbito de los estudios performativos y más exactamente en la relación entre las prácticas artísticas post-estudio y las teatrales post-dramáticas. La acción es el centro de esta conexión; en el entorno artístico es un factor capaz de impulsar el giro hacia lo político, mientras en el espacio teatral ese giro se da cuando desaparece la acción dramática convencional. El denominado “giro performativo” se establece así como motor del “giro social”. Esta conexión entre la esfera artística y la vida desde una perspectiva política da lugar a las identificadas como “prácticas sociales” en esos dos ámbitos, sin mayor interés por señalar cuáles corresponden a uno y otro. Las prácticas sociales parten de la consciencia de ciertas condiciones performativas en la creación artística como la transdisciplinaridad, la colaboración y las relaciones de interdependencia. No se definen por objetivos homogéneos, sino que responden más bien a un conjunto de metodologías, perspectivas y formas de hacer dirigidas y debidas a las estructuras sociales, las propias del contexto en el que se desarrollan o las posibles.

La acción es el centro de esta conexión; en el entorno artístico es un factor capaz de impulsar el giro hacia lo político, mientras en el espacio teatral ese giro se da cuando desaparece la acción dramática convencional

Este ensayo analiza los potenciales, problemáticas, tensiones y conflictos de algunas prácticas sociales performativas en EE.UU. y Europa desde la década de los setenta hasta 2010, a partir de puntos de encuentro y desencuentro con la estética relacional de Nicolas Bourriaud, el giro social de Claire Bishop y ciertas teorías políticas, de Ernesto Laclau y Chantal Mouffe a Michael Hardt y Antonio Negri.…

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