Se hundió la Babilonia
Porque le faltó el cimiento
Nuestro querer no se acaba
Aunque falte el firmamento
Pepe de la Matrona y Perico del Lunar (soleá)
Jan Yoors tenía trece años la primera vez que pasó el verano con gitanos a las afueras de Amberes.
Teresa Lanceta, en distintos momentos de su vida, también vivió cerca de ellos. (En Barcelona su casa estaba en la calle Jerusalén). En el tapiz de la artista incluido en la exposición se habla del cuadrado como la forma por excelencia de la modernidad. Frente a eso, el triángulo, lo contingente, lo inesperado. No muy lejos, en un tapiz de Le Corbusier hay algo así como una estructura geométrica en la que los colores puros y sintéticos se separan del laberinto y del cuerpo. El tapiz como arquitectura, como elemento espacial para separar y modificar espacios en cuanto a la temperatura y la acústica. Los pies para bailar y para andar.
¿Puede la arquitectura acoger formas de vivir -no tanto de habitar-?
Máquinas de vivir. Flamenco y arquitectura en la ocupación y desocupación de espacios es un proyecto comisariado por María García y Pedro G. Romero y que actualmente se expone en Centro Centro Cibeles. El proyecto analiza las transformaciones espaciales que surgen en la arquitectura asistencial del tardofranquismo, en las prácticas situacionistas y en el ámbito de la escena independiente andaluza. Desde 2014 se han llevado a cabo distintos encuentros, cursos y seminarios para presentar el desarrollo de la investigación. La vocación de la exposición se ajusta a este formato de ensayo, en el que se van inscribiendo distintos comentarios a casos concretos de estudio. De la misma forma, el propio dispositivo acompaña a la idea de exceso, el archivo, la acumulación, incluso los restos del desmontaje de la exposición anterior.
El título alude a una anécdota en la que Lorca y Falla pasean por el Albaicín y, asomándose a la casa de un flamenco, el poeta asegura estar viendo una máquina de habitar de Le Corbusier. En esa mirada se confunden los principios del purismo y el funcionalismo con la casa probablemente humilde y despojada de decoración de un gitano. A partir de ahí quedan flotando en la exposición cuestiones como la manera en que el cuerpo flamenco habita los espacios, muchas veces obviando aspectos integrados en los proyectos originales de arquitectura y otras sirviendo como modelo de inspiración.
El muro blanco como superficie higiénica.…
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