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Habitar la Tierra, habitar la casa. El espacio doméstico según Emanuele Coccia

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Anna Malagrida, Fachada II, 2002, serie Interiores. La intrusión en el espacio privado desde el espacio urbano.

Nuestro planeta se está volviendo inhabitable. Al tiempo que los recursos naturales que permiten la vida en él se reducen a marchas forzadas, microorganismos diminutos y majestuosas fuerzas de la naturaleza se despiertan, poniendo en jaque la supervivencia del ser humano. Ante un exterior incierto, el interior de nuestras casas se ha revelado, en tiempos de pandemia, como el único sitio seguro. Ya lo decía Dorothy en El mago de Oz1En la versión cinematográfica de 1939 de Victor Fleming: “Se está mejor en casa que en ningún sitio”. Si mejor o peor, habrá opiniones para todo, pero el caso es que últimamente lo estamos experimentando de forma intensa. Como resultado, numerosos proyectos recientes tienen como objeto reflexionar sobre el habitar en el mundo actual2Como los que centraron el número 84 de Exit, “Home Sweet Home” (octubre-diciembre 2021).

Curiosamente, fue antes de la pandemia, sin sospechar que el tema se haría tan presente, cuando Emanuele Coccia (Fermo, Italia, 1976) empezó a escribir Philosophie de la maison. L´espace domestique et le bonheur3Publicado en 2021 en Payot et Rivages. La traducción en español sería Filosofía de la casa. El espacio doméstico y la felicidad. El pensador italiano, profesor en la École des hautes études en sciences sociales (EHESS) en París y pop star de la filosofía, ha centrado sus últimas investigaciones en los campos de la ecología y de la moda. Combinando alta y baja cultura, es habitual de los círculos de artistas y diseñadores, pero también un divulgador de las teorías sobre la genealogía de la vida, más allá de la vieja oposición entre naturaleza y ser humano.

Combinando alta y baja cultura, es habitual de los círculos de artistas y diseñadores

Su crítica de los modos de vida propios del antropoceno ha dado la vuelta al mundo desde su reivindicación de La vida sensible (La vie sensible en el original, Payot & Rivages, 2010) y La vida de las plantas (La vie des plantes. Une métaphysique du mélange, misma editorial, 2016). Con esta publicación reflexiona ahora sobre la urgencia de repensar el hábitat y el ámbito doméstico. En su opinión, si el futuro de la Tierra ya no es posible fuera sino dentro, no nos quedará otra posibilidad que hacer de nuestro planeta una verdadera morada; o, lo que es lo mismo, hacer de nuestra morada un verdadero planeta. La ya clásica tesis de la interdependencia de lo local y lo global conduce a la propuesta de una cohabitación interespecies, muy en la línea de las teorías defendidas por las pensadoras Donna Haraway o Vinciane Despret.…

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