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Corinne Vionnet

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Corinne Vionnet. Roma, from Photo Opportunities series, 2007. Courtesy of the artist and Danziger Gallery, New York.

Un movimiento glaciar

El Arco del Triunfo, el Big Ben, el Taj Mahal, el Moulin Rouge… Conocemos todos y cada uno de los hitos turísticos y emplazamientos representados en la serie Photo Opportunities de la fotógrafa suiza Corinne Vionnet. Como sucede en los cuadros de J. M. W. Turner, que plasman atmósferas etéreas donde el océano se (con)funde con el cielo, una densa neblina nos impide contemplar el lugar retratado con la claridad a la que estamos acostumbrados. Ante estas imágenes, nuestro extrañamiento es doble: en primer lugar, puesto que desconocemos a ciencia cierta la naturaleza del medio técnico con el que han sido creadas; en segundo lugar, a causa de la inusual falta de nitidez con la que se muestran estos icónicos monumentos.

Como sucede en los cuadros de J. M. W. Turner, que plasman atmósferas etéreas donde el océano se (con)funde con el cielo, una densa neblina nos impide contemplar el lugar retratado

Deudora de la tradición de la ecología visual y de la postfotografía, Corinne Vionnet genera imágenes por ensamblaje, superponiendo cientos de fotografías de un mismo entorno turístico (rescatadas de Flickr) en una sola imagen. El resultado consiste en una suerte de trampantojo fotográfico: un destilado visual que adopta la apariencia de un dibujo hecho a carboncillo o de una pintura difusa —espectral, “ruidosa”—, como si se tratase de una imagen de la memoria que se desvanece por momentos. Su emborronamiento nos hace sospechar el tránsito de muchas personas; también nos evoca la masiva circulación de imágenes en el ciberespacio. Sin embargo, el ingente archivo virtual que transita Corinne Vionnet queda coagulado y reflejado en la imagen nebulosa, única y esencial (de todos y de nadie), cuya visión pone de manifiesto el rastro plural de los viajes de cientos de turistas, para quienes la fotografía del monumento icónico se convierte en un trofeo, es decir, en una evidencia irrefutable para demostrar su presencia en dicho lugar. “Yo estuve aquí”, dice la imagen, o también: “Yo estoy aquí”, en el momento en que se sube a Instagram, Facebook, Be Real…

De esta forma, si prestamos atención a Photo Opportunities, nos daremos enseguida cuenta de que el elemento verdaderamente protagonista es el movimiento: por una parte, el de los turistas que se cruzan en medio de las fotografías —y cuyo espectro aparece entrelazado junto al de innumerables transeúntes—, pero, sobre todo, el de las imágenes re-producidas por miles en cualquier destino, sea cual sea el enclave histórico en cuestión.…

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