Félix de Cárdenas era uno de los mayores representantes del realismo de su generación, pintor figurativo, heredó el gusto por el paisajismo y la plástica de artistas como Joaquín Sáenz. Desde muy joven, era un visitante habitual del museo de Bellas Artes de Sevilla, donde comenzó a desarrollar su gusto por el arte. El Sevillano cursó su estudios de Bellas Artes en su ciudad natal. Sus cuadros han llegado a formar parte de grandes colecciones nacionales e internacionales e incluso creó los carteles de la temporada taurina de la maestranza o la Semana Santa de la Macarena.
La antigua Caja San Fernando presentó en el año 20015 una retrospectiva del artista, Travesías 1973-2005. En esta exposición se expusieron más de 13 obras de Félix de Cárdenas, comprendidas entre óleos y grabados, disciplina esta última en la que el artista desarrollo casi toda su obra en los años 80. Su obras mostraban, sobretodo, paisajes en los que los ríos y los atardeceres se apoderaban del espectador. También destacaron sus bodegones, con un estilo realista que formaba parte de la firma de artista.