Hacer la necrológica de un amigo es algo extraño. Deja de tener importancia su trayectoria como periodista puro, sus años de corresponsal en Londres o Berlín, sus años de radio, todos sus programas en RNE, sus críticas sobre música, su trabajo como crítico y comisario de arte. Ya se ha olvidado que fue uno de los creadores del ABC Cultural. Se olvida casi todo con el paso del tiempo. Pero JM Costa fue el mejor crítico de música que hemos conocido en mi generación. José Manuel ha muerto esta noche, de un infarto certero y sin posibilidad de enmienda. El hecho anula cualquier recuerdo frío de una vida de tantos años dedicada a la cultura, al conocimiento, pero sin escándalo, sin ruido, solo con música.
Experto en arte sonoro con su ausencia perdemos la posibilidad de leer ese libro que siempre prometía y que ya no podremos publicar ni leer
Nacido en Madrid en 1949, estudia en el Colegio Alemán, algo que significa una forma, un método ya para toda su vida. El hablaba idiomas (inglés y alemán perfectamente) en un paisaje en el que todavía muy pocos se planteaban salir de España. José Manuel era un compañero y un colega al que siempre se podía acudir, aunque a veces no estuviéramos en la misma onda, pero su conversación, su conocimiento, su criterio, siempre nos ayudaba a aprender, a entender.
Experto en arte sonoro con su ausencia perdemos la posibilidad de leer ese libro que siempre prometía y que ya no podremos publicar ni leer. Efectivamente el tiempo borrará todo, hasta nuestra memoria, pero la ausencia de los amigos, de los compañeros, es algo que nunca se llena, huecos, agujeros en la vida que nos queda. A él, que le gustaba tanto viajar, sólo le podemos decir buen viaje. Hasta la próxima José Manuel.
