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Liliana Porter: “Cada espectador es un contexto”

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Liliana Porter
Liliana Porter, Trabajo forzado, Tejedora (detalle), 2005.

Liliana Porter nació en Argentina (Buenos Aires, 1941), donde realizó sus estudios de Bellas Artes, y entre 1958 y 1961 vivió en la ciudad de México. Allí estudió con el colombiano Guillermo Silva Santamaría y con el artista alemán Mathias Goeritz en la Universidad Iberoamericana y en el Taller de La Ciudadela. También fue en el DF mexicano donde realizaría sus primeras exposiciones. Pero en 1964 viaja a Nueva York y desde entonces vive en esa ciudad. En su periplo vital su obra ha vivido también un largo recorrido, tal vez incluso más complejo y variado que sus viajes por la geografía americana. Desde la obra gráfica al objeto, al dibujo, a la fotografía, al video… al teatro. Su obra tiene una característica que hoy en día es cada vez más difícil de encontrar: es absolutamente personal y diferente, reconocible como suya sin duda en la primera mirada. Diferente. Propia. Singular. Hasta el pasado mes de agosto se ha podido ver su primera muestra antológica en España en el museo ARTIUM de Vitoria, “Diálogos y desobediencias”, comisariada por Estrella de Diego y que ahora inicia una itinerancia por distintos museos de España.

Liliana Porter es una artista que se fija en los detalles, en lo cotidiano, que encuentra en cada pequeña cosa el sentido y el sinsentido de las grandes cosas. En su obra se habla de la dificultad y del esfuerzo, de la incomunicación, de lo imposible, de la soledad, de la propia vida. Y de las relaciones entre las personas y de estas con la realidad y con los imposibles, con las cosas y con sus nombres. Diálogos y desobediencias, finalmente. Liliana Porter es, además, una persona afable, cercana y que ha aceptado hacer con nosotros una de estas breves y concisas entrevistas en las que sólo se habla de lo esencial en apenas unas pocas preguntas.

La obra de Porter tiene una característica que hoy en día es cada vez más difícil de encontrar: es absolutamente personal y diferente

Rosa Olivares: Siempre se dice que trabajas con elementos y objetos insignificantes, ¿Por qué crees tú que piensan que son insignificantes todas esas figuras de animales, personas, cosas…? Para ti ¿qué es realmente insignificante?

Liliana Porter: Insignificante es algo a lo que aun nadie le concedió significado. No es una categoría objetiva. Es una descripción del sentido que cada uno establece con la cosa. En general, esos figurines de plástico u objetos hechos en producción masiva, son considerados insignificantes porque son decorativos, no tienen un valor alto monetario, no están hechos de materiales preciosos, no son únicos.…

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