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Teresa Solar: “Las superficies de mis obras hablan del vacío que se esconde detrás”

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Foto: Teresa Solar tras una de sus piezas.

Teresa Solar Abboud (Madrid, 1985) me recibe en su estudio recientemente inaugurado. La nave está repleta de sus características piezas de barro a medio modelar, bocetos de colores brillantes cubren las paredes y, al fondo de la nave, su colaborador Eduardo, pule a conciencia las aletas de una obra en proceso. Nos sentamos en el soleado patio que ocupa el lugar central del estudio y conversamos largo y tendido sobre mundos de fantasía y conexiones intergalácticas, terrenalidades y el oficio del artista, para terminar evadiéndonos en el paisaje de un desierto con posibilidades indefinidas.

Marina Avia: ¿Pertenece tu obra a un surrealismo del siglo XXI? ¿Qué hay de ficción y qué de surrealismo en ella?

Teresa Solar: En primer lugar, no sé a ciencia cierta si estamos ante un resurgimiento oficial del surrealismo. Sí es cierto que la curaduría de Cecilia Alemani en el Pabellón de la Biennale di Venezia, The Milk of Dreams, es un homenaje a Leonora Carrington, y que vuelve a poner el foco en el surrealismo. Por mi parte, lo que realmente me atrae del surrealismo es su inmensa libertad; frente a la rigidez que a veces define la esfera actual del arte contemporáneo, el surrealismo puede ser un soplo de aire fresco. Muchas de las prácticas artísticas de hoy en día beben de lo post-conceptual que a veces nos encorseta en estructuras excesivamente rígidas, donde “el discurso” en mayúsculas, prevalece sobre otras esferas. Mi acercamiento a prácticas que hablan de fantasía, misticismo, imaginación, ha sido siempre muy instintivo. Y es en ese sentido en el que, sin por supuesto considerarme ni heredera ni de re-editora del surrealismo, me siento cercana al espíritu de este movimiento.

Forma de fuga. Foto: Pablo Gómez-Ogando. Cortesía de la artista y de Travesía Cuatro.

Mi acercamiento a prácticas que hablan de fantasía, misticismo, imaginación, ha sido siempre muy instintivo

MA: Estoy de acuerdo en que durante muchos años las prácticas derivadas de lo post-conceptual, del post-minimalismo, han desplazado a prácticas como las surrealistas al rincón de lo naive, o incluso de aquello que no hacía falta revisitar. Sin embargo, en tu obra, la propia morfología de tus piezas dista mucho de formas angulares, rígidas y serias y da paso a una plasticidad asociada al juego y a la libertad más propia de las prácticas surrealistas.

TS: Me siento muy identificada con las formas ameboides de las que está plagado el surrealismo, evidentemente este imaginario está muy presente.…

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