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Nikki S. Lee

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Nikki S. Lee. Part (16), 2003. Courtesy of the artist and Sikkema Jenkins & Co., New York

Parts

En 1997, la fotógrafa Nikki S. Lee (Corea, 1970) comienza su serie Projects, disfrazándose y actuando como si perteneciera a diferentes colectivos. Sus fotografías, que bien podrían considerarse mascaradas, van más allá de la representación de la identidad, por la que trata de visibilizar los géneros, razas o sexualidades que apenas fueron representados a lo largo de la historia. Lee sale de la fotografía de estudio para inmiscuirse en diferentes grupos sociales, colándose en las imágenes que ellos mismos suelen hacerse. No se trata de la interpretación de un personaje sino de la imitación de su forma de hacer fotografías, de un cuestionamiento que va más allá del género del retrato para criticar lo real desde el género de lo real: el reportaje. El supuesto documento fotográfico cuenta con un outsider, una impostora que imita el estilo del snapshot o instantánea que cada colectivo practica. Suplanta, de esta forma, la mirada que el colectivo tiene hacia sí mismo, utiliza su forma de autorrepresentación como si fuera uno de ellos.

Sus fotografías van más allá de la representación de la identidad, trata de visibilizar los géneros, razas o sexualidades que apenas fueron representados a lo largo de la historia

Este interés sociológico evoluciona hacia una crítica de las relaciones en su siguiente serie Parts (2002-2004). Presentando sólo una parte de la fotografía, no miente pero sí oculta parte de la verdad para hacernos mirar lo que falta. El corte al igual que el borrón, la interrupción y la repetición incide en la manipulación y la mentira, al igual que sucede con el falso documental en el cine o la autoficción en la literatura. Ser stripper, hippie o yuppie, siendo mujer conlleva siempre una sombra, la de un hombre que Lee ha cortado cuidadosamente. Deja siempre un resquicio de esa mirada masculina que condiciona la representación social, como vemos en la fotografía editorial (The Bourgeoisie, 2004) o la fotografía de bodas (The Wedding, 2005).

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