Entrevista con Manel Esclusa: “El principio de todo es la oscuridad”
Manel Esclusa es un fotógrafo que ha sabido vivir en la gran ciudad, en un tiempo real y a la vez no perder el contacto con las esencias de la percepción. La fotografía no es para él solamente una técnica, es una forma de ver y de poder transmitir esas visiones construidas de una realidad que no todos podemos ser capaces de descubrir. La arquitectura, las luces, pero también y sobre todo las sombras, la naturaleza, la idea de la luz y de la oscuridad, su diálogo imprescindible para que surja la vida o lo que es lo mismo, la imagen, marcan toda una trayectoria artística mucho más amplia de lo que la mayoría conoce. Avidez en su mirada, en sus manos, y tranquilidad en la palabra de un hombre que mira siempre a través de la idea de una cámara, de la poesía de la fotografía y de la dura realidad de una vida con sombras y luces, con zonas oscuras y con luces cegadoras, donde el conocimiento, la contemplación y la reflexión se convierten en la propia materia de sus imágenes.
La noche no es solo el contrapunto al día es también una metáfora. La noche es la oscuridad, es el peligro. Antes de existir la luz eléctrica la noche suponía algo parecido al terror absoluto. Para la fotografía la luz es un tema, un escenario, sin embargo no es fácil para la fotografía trabajar en la oscuridad.
La fotografía necesita como mínimo, la luz de la luna. Que es una luz reflejada pero que es la única luz posible en una noche sin luz eléctrica. Pero en la fotografía también importa el tiempo, dependiendo del tiempo de exposición una fotografía hecha de noche puede parecer hecha de día. Cuando se fotografía en la naturaleza es muy importante determinar el tiempo de exposición para que no vaya más allá y se transforme en día. A mí me interesa más la fotografía nocturna cuando la aplico en el espacio urbano.
La gran mayoría de los fotógrafos cuando trabajan en la noche aprovechan la luz eléctrica, los neones, las farolas, para dotar a las imágenes de un cierto misterio. Tú eres de los pocos que trabajas en la noche de la ciudad y en la noche de la naturaleza.
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