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Candida Höfer

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Candida Höfer. BNF Paris XXIII, 1998. Courtesy of the artist and Galería Fúcares, Madrid

Bibliotecas / Retrato de una biblioteca

Hace treinta siglos los sumerios tenían un depósito central donde archivaban unas tablas de arcilla en las cuales registraban los acontecimientos históricos, sus posesiones y otros datos que pensaban que era necesario transmitir a sus descendientes. Los textos están escritos en una de las primeras formas conocidas de escritura: los signos cuneiformes.

Siglos después, en el año 300 a.C., la colección privada del filósofo griego Aristóteles se convirtió en el germen de lo que sería la mítica biblioteca de Alejandría. Esta institución se propuso la ambiciosa tarea de reunir todas las obras escritas que existiesen. Su bibliotecario estuvo investigando y se llevaron manuscritos desde regiones remotas hasta Egipto para que se pudieran copiar los contenidos a mano. El prurito por coleccionar alcanzó tales cotas que se registraban todos los buques que arribaban al puerto de la ciudad para ver si había a bordo alguna publicación desconocida.

Iwan Baan. Library of the Rijksmuseum in Amsterdam, The Netherlands, 2004. Courtesy of the artist

Tanto la biblioteca más alabada de los sumerios, la Biblioteca de Ebla, como su equivalente en Alejandría, fueron pasto de las llamas. En el primer caso, las tablas de arcilla que, debido a las altas temperaturas, se transformaron en ladrillos, se salvaron de la devastación total y se conservaron hasta nuestros días. De los más de 700.000 rollos de papiro que habían reunido los egipcios, supuestamente no queda nada y transcurrieron siglos antes de que apareciese una biblioteca que pudiera igualar la inconmensurable magnitud que por medio del esfuerzo alcanzó la gran Biblioteca de Alejandría. Fue después de la invención de la imprenta en el siglo XV cuando se empezó a disponer cada vez de más libros para su distribución, pero las bibliotecas públicas no se popularizaron hasta comienzos del siglo pasado y hoy en día toda ciudad occidental cuenta con su propia colección.

La biblioteca es uno de los temas que la fotógrafa alemana Candida Höfer trata con profusión en su obra fotográfica. El abanico de imágenes que ya ha producido muestra lo diferente que puede ser un espacio a pesar de que cumpla exactamente la misma función. No existen dos bibliotecas iguales, cada colección es única. Cuando se contemplan estas obras, llaman la atención las diferencias y semejanzas notables. Las bibliotecas modernas son en general espacios dispuestos de manera funcional, las que un día fundaron los miembros de la nobleza a menudo irradian poder y majestuosidad, están construidas para impresionar y su función es la de un expositor de la casa.…

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