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Ángela de la Cruz. Si no te mata, te hace más fuerte

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Ángela de la Cruz. Scratch 4 (Blue), 2011. Foto: cortesía de Ángela de la Cruz Studio

Ángela de la Cruz ya llevaba veinte años trabajando como artista cuando en 2005 sufrió un derrame cerebral que la mantuvo en coma durante tres semanas. Entonces tenía cuarenta años.

La sociedad necesita establecer unos parámetros con los que definir y medir cuestiones relacionadas con el desarrollo, el conocimiento, las habilidades, la forma física, el bienestar social, la calidad y un sinfín de asuntos que precisan de cierta regulación. El arte, en cuanto producción artística se refiere, es una de las pocas actividades profesionales que escapa a las regulaciones. No tiene límites, todo vale. Lo cual no quiere decir que todo sea bueno.

Hay métodos que nos ayudan a evaluar y factores que nos ayudan a conocer cuándo un artista ha alcanzado un lugar importante en su carrera. Para empezar es importante escuchar la voz de los profesionales. Los indicadores con los que contamos son los reconocimientos que el o la artista va recibiendo a lo largo de su carrera: los galardones y premios obtenidos, los museos e instituciones en los que expone, las colecciones de las que forma parte, las galerías con las que trabaja, así como las críticas que recibe y las publicaciones que recogen su obra.

La discapacidad ha ampliado mis horizontes y perspectivas de vida. Aunque tengo algunas limitaciones prácticas, en mi mente soy libre

Basándonos en estos criterios obtenemos la confirmación de que Ángela de la Cruz es una de las grandes artistas contemporáneas que ha alcanzado un reconocimiento internacional llegando a lugares a los que pocos artistas han llegado. En 2017 ganó el Premio Nacional a las Artes Plásticas en España, en 2010 fue una de las nominadas al Turner Prize en Londres, ha expuesto en el Museo Guggenheim de Bilbao, en el Camden Arts Center de Londres, en el Culturgest de Lisboa, en el MARCO (Museo de Arte Contemporánea de Vigo); trabaja regularmente con las galerías Lisson Gallery de Londres, Helga de Alvear y Carreras Múgica en España, John Weber en Nueva York o Thomas Schulte en Berlin, estos son apenas unos cuantos de los factores que nos demuestran que Ángela se mueve entre la élite del mundo del arte mundial.

Algunos de estos reconocimientos llegaron antes del fatídico día en que sufrió un derrame cerebral.…

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