post_type:dossier
Array ( [0] => 96892 [1] => 96893 [2] => 96894 [3] => 96895 [4] => 96896 [5] => 96897 [6] => 96898 [7] => 96899 [8] => 96900 [9] => 96901 [10] => 96902 [11] => 96903 [12] => 96904 [13] => 96905 [14] => 96906 [15] => 96907 [16] => 96908 [17] => 96909 [18] => 96910 [19] => 96911 [20] => 96912 [21] => 96913 [22] => 96914 [23] => 96915 [24] => 96916 [25] => 96917 [26] => 96918 [27] => 96919 [28] => 96920 [29] => 96921 [30] => 96922 [31] => 96923 [32] => 96924 [33] => 96925 [34] => 96926 [35] => 96927 [36] => 96928 [37] => 96929 [38] => 96930 [39] => 96931 [40] => 96932 [41] => 96933 [42] => 96934 [43] => 96935 [44] => 96936 [45] => 96937 [46] => 96938 [47] => 96939 [48] => 96940 [49] => 96941 [50] => 96942 [51] => 96943 [52] => 96944 ) 1
size_articulos_ids: 53
Current ID: 96940
Current pos: 48
Articulo anterior: Octavio Zaya
Articulo siguiente: Graciela Iturbide
prevID: 96939
nextID: 96941
anterior

Alberto García-Alix

siguiente
Anders Petersen. Café Lehmitz, Hamburg, 1970. Courtesy of the artist.

Escoger una foto como favorita supera mi capacidad de empatía con la imagen. Cientos serían las fotos que escogería como favoritas, pero obligado a una, tomaré ésta del libro Color Lehmitz de Anders Petersen.

La he elegido porque lleva en sí noche y alcohol. Posee pulsión sexual y seducción, tanto en él, como en ella. Es la ternura del amor comprado. Además, hay ritmo. Bailan mientras el mundo a su alrededor sigue girando, y la sinceridad y luz de bar que envuelve y define la escena son inimitables.

Por último, debo añadir que la imagen está sacada de una de las hojas de contacto de Café Lehmitz. De ahí que la imagen esté marcada con colores, con puntos y hasta con una equis, que la separan del resto y le dan el estatus que quiso su autor y, lo que me parece más interesante, le aporta una nueva dimensión plástica a esta imperecedera fotografía.…

Este artículo es para suscriptores de ARCHIVO

Suscríbete